Autoridades de Brasil y Paraguay se reunieron el pasado jueves 2 de octubre para definir los próximos pasos hacia la apertura de la puente de la integración, la estructura que unirá Foz do Iguaçu con Presidente Franco.
Aunque la obra principal fue finalizada en agosto de 2023, el tránsito aún no está habilitado debido a la falta de finalización de los accesos y de las instalaciones aduaneras en ambas cabeceras.
Cronograma de apertura
Durante el encuentro, representantes de la dirección Paraguaya de Itaipú y de organismos brasileños acordaron un cronograma de habilitación gradual:
- Hasta el 30 de noviembre de 2025 se prevé la entrega de las instalaciones brasileñas a los organismos de control.
- La aduana paraguaya ya fue concluida y entregada el 8 de septiembre.
- A partir del 5 de diciembre de 2025, las autoridades esperan iniciar el tránsito con camiones vacíos, entre las 7:00 y las 19:00 horas.
- En etapas posteriores se habilitará el paso de camiones cargados y, finalmente, de vehículos livianos y peatones.
La inauguración oficial contará con la presencia de los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Santiago Peña, aunque la fecha definitiva dependerá de la agenda de ambos mandatarios.
Obras complementarias y desafíos
Del lado paraguayo, el Corredor Metropolitano del Este, que conectará la nueva estructura con las principales vías del país vecino, estaría listo recién hacia fines de 2026. De los seis lotes que componen el proyecto, cinco se prevén terminar en 2025, mientras que la construcción del puente sobre el río Monday demandará al menos un año más de trabajo.
En territorio brasileño, el acceso por la Perimetral Leste avanza, aunque algunos tramos siguen en ejecución. Además, el proyecto del puerto secoo, esencial para el movimiento de cargas, se encuentra aún en una etapa inicial.
Según el informe presentado durante la reunión binacional, la apertura de la vía será progresiva y comenzará únicamente con vehículos que cumplan los requisitos de seguridad y autorización.
Un nuevo impulso para la frontera
La puente de la integración representa una infraestructura estratégica para ambos países, ya que busca descongestionar el puente de la amistad, actualmente saturada por el flujo diario de vehículos y cargas. Se espera que el nuevo corredor favorezca el comercio, la logística y la movilidad regional.
Si el cronograma se cumple, el tránsito parcial previsto para diciembre de 2025 marcará un hito para la región trinacional, aunque la operación completa de la vía —incluyendo autos particulares, colectivos y peatones— dependerá de la conclusión de los accesos y de los acuerdos operativos entre Brasil y Paraguay.
La próxima reunión de la comisión binacional está programada para el 18 de noviembre de 2025, fecha en la que podrían anunciarse ajustes o confirmaciones finales del cronograma de apertura.