La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, presentó este lunes el Plan Paraná, una estrategia destinada a reforzar el control de la Hidrovía Paraguay–Paraná y evitar que el corredor fluvial se convierta en “una autopista del crimen”.
El anuncio se realizó con un despliegue simultáneo: Bullrich encabezó la presentación desde una embarcación de la Prefectura Naval en Buenos Aires, mientras que la secretaria de Seguridad, Alejandra Monteoliva, inauguró el comando unificado en la Isla del Cerrito, Chaco.
El plan contempla la participación de las cinco fuerzas federales —Prefectura, Gendarmería, Policía Federal, Policía de Seguridad Aeroportuaria y fuerzas provinciales— con el objetivo de blindar el corredor contra el narcotráfico, el contrabando y la trata de personas.
“Control total y absoluto de nuestras fronteras para que ni un milímetro de territorio argentino esté bajo el poder del delito, el crimen organizado y el narcotráfico”, afirmó Bullrich.
La Hidrovía Paraguay–Paraná es el principal corredor de transporte fluvial del país y uno de los más importantes de la región, clave para la exportación de granos, combustibles y bienes industriales. Su extensión y tránsito intenso la convierten en un punto estratégico para organizaciones criminales.
El Plan Paraná prevé controles permanentes, patrullajes fluviales, incorporación de tecnología de vigilancia y coordinación con provincias y países vecinos. Según el Ministerio de Seguridad, se trata de un paso más en la “guerra sin cuartel” contra el crimen organizado.